Habiendo sido alcanzados por la gracia del evangelio, estamos comprometidos con proclamar fielmente el evangelio de Jesucristo, en dependencia del Espíritu Santo, para alcanzar a las almas en sedientas de nuestro país y alrededor del mundo, por los medios que Dios disponga…
Edificar nuestra fe en las promesas de Dios dadas en Cristo. Vivir el presente con nuestra mirada en lo eterno, y, por los medios de gracia, ser un modelo de santidad, servicio y adoración al mundo que nos rodea.